lunes, 6 de diciembre de 2010

LOS AMIGOS

LOS AMIGOS
Julio Cortázar
Julio Florencio Cortázar fue un escritor, traductor e intelectual argentino, nacido en Bruselas, Bélgica, pero de padres argentinos, el 26 de agosto de 1914.
Se le considera uno de los autores más innovadores y originales de su tiempo, maestro del relato corto, la prosa poética y la narración breve y creador de importantes novelas que inauguraron una nueva forma de hacer literatura en Latinoamérica, rompiendo los moldes clásicos mediante narraciones que escapan de la linealidad temporal y donde los personajes adquieren una autonomía y una profundidad psicológica, pocas veces vista hasta entonces. Debido a que los contenidos de su obra transitan en la frontera entre lo real y lo fantástico, suele ser puesto en relación con el surrealismo.

Vivió buena parte de su vida en París, ciudad en la que se estableció en 1951, en la que ambientó algunas de sus obras. En 1981 se le otorgó la ciudadanía francesa. Cortázar también vivió en Argentina y Suiza. Murió en la llamada “Ciudad de la Luz” el 12 de febrero de 1984.




Narrador extradiegético u omnisciente.         
·        Es el narrador más común de la narrativa tradicional.
·        Es aquel que lo sabe todo; como lo que piensan los personajes, lo que sienten, e incluso su pasado. Cuenta la historia aunque no la vivió como personaje.
·        Está en tercera persona, voz narrativa que favorece siempre el objetivismo.  Es, por lo tanto, una entidad extraña al universo ficticio representado.
·        También es propio de un narrador omnisciente la distribución de la narración a su antojo, en ocasiones hace una pausa para dirigirse de forma directa al lector.



La concepción de Cortázar  del juego,  introduce elementos nuevos a la definición tradicional. Para  él, jugar era organizar la vida,  era inventar ritos y ceremonias para aplicarlas a situaciones cotidianas, escondiéndolos entre velos de realidad para confundir al lector. En Cortázar juegan los niños y los adultos; los primeros por diversión, los segundos para escapar de su inseguridad o de sus miedos. Los personajes no siempre saben del juego ni se divierten jugando. A veces el precio que pagan por jugar es caro: las diversiones pueden envolverlos y encerrarlos hasta matarlos, y también pueden volverlos locos.

“Los amigos”  aparece en la obra “El final del juego”. En este cuento, el juego aparece planeado y premeditado de una forma macabra. A cada uno de los jugadores le es asignado un número de identificación. Cada uno atiende a su juego y cumple con su parte. El autor material y el intelectual del crimen saben obviamente que están jugando, el que no sabe es la víctima. El lector también se da cuenta de inmediato, ya que el cuento empieza diciendo “en ese juego todo tenía que andar rápido”. Aquí aparece el juego – traición, ya que se mata al otro amigo. No hay juego de realidad - ficción. El cuento es realista en todo momento.



La literatura de Cortázar parte del cuestionamiento vital, cercano a los planteamientos existencialistas, en obras de marcado carácter experimental, que lo convierten en uno de los mayores innovadores de la lengua y la narrativa en lengua castellana. Sus relatos ahondan en lo fantástico, aunque sin abandonar por ello el referente de la realidad cotidiana, por lo que sus obras tienen siempre una deuda abierta con el surrealismo.
Para Cortázar, la realidad inmediata significa una vía de acceso a otros registros de lo real, donde la plenitud de la vida alcanza múltiples formulaciones. De ahí que su narrativa constituya un permanente cuestionamiento de la razón y de los esquemas convencionales de pensamiento.
El instinto, el azar, el goce de los sentidos, el humor y el juego terminan por identificarse con la escritura, que es a su vez la formulación del existir en el mundo. Las rupturas de los órdenes cronológico y espacial sacan al lector de su punto de vista convencional, proponiéndole diferentes posibilidades de participación, de modo que el acto de la lectura es llamado a completar el universo narrativo.



·        Número 1:
Actor intelectual de la muerte de Romero.
·        Romero:
Asesinado con un balazo por su amigo Beltrán.
·        Beltrán o Número 3:
Amigo y asesino de Romero.







CUADRO COMPARATIVO - MOVIMIENTOS ARTISTICOS

LITERATURA EUROPEA

LITERATURA EUROPEA
La literatura europea es el conjunto de manifestaciones literarias de carácter plurilingüe, orales y escritas, producidas en el ámbito geográfico de los países europeos desde la desaparición del Imperio romano hasta la actualidad.
La pervivencia de la Iglesia Romana funcionó como gozne entre el final del mundo antiguo y el inicio de la Edad Media, sobre todo porque, al ser el latín la lengua de la Iglesia, la lengua de Roma seguirá siendo un elemento unificador para la primera literatura que podemos llamar europea.
La Edad Media literaria en Europa se caracterizó por la convivencia de una literatura latina común, que recogió la mayor parte de la literatura culta, con una serie de literaturas vernáculas de ámbito más local, ligadas en origen a la oralidad.
En el siglo XI comienza a generalizarse en Europa la literatura en lenguas vernáculas, relacionadas inicialmente con la lírica oral popular, y con las distintas tradiciones épicas germanas.
A partir del siglo XV y tomando como punto de referencia modelos literarios italianos, se extendió por Europa una concepción nueva de la literatura basada en la idea de que el verdadero prestigio cultural otorgado por el respeto a las normas de la cultura grecolatina antigua. A esta época se le conoce como Renacimiento y a partir de él surgieron el Barroco y el Neoclasicismo.
El Renacimiento se originó en la península itálica gracias a la labor de los humanistas que, en su empeño por recuperar el esplendor del Imperio romano rescataron sobre todo la lengua y las artes.
En el siglo XVII el Barroco impuso una mayor complejidad en las formas y un cambio de perspectiva sobre determinados temas renacentistas pero no modificó su punto de partida original, El Neoclasicismo, a su vez, insistió más aún en esa concepción vicaria de la literatura europea en relación con la grecolatina.
El estallido de la Primera Guerra Mundial marcó el inicio del fin de la situación de privilegio que Europa había tenido en el mundo desde el siglo XVI. A su vez, la gran catástrofe humanitaria que supuso la Segunda Guerra Mundial, provocaron el fin de la continuidad cultural europea y, por lo tanto, de su expresión literaria.
El siglo XXI, permite suponer que cada vez será más difícil que algún día Europa pueda volver a desarrollar algún movimiento cultural  (y por lo tanto literario) propio.




MOMO

MOMO
Michael Ende
Michael Andreas Helmut Ende, nació en Garmisch-Partenkirchen, Alemania, 12 de noviembre de 1929.  Hijo único del pintor surrealista Edgar Ende y de Luise Bartholomä, una fisioterapeuta. Su infancia estuvo marcada por el ambiente artístico y bohemio en que se movía su padre. En su juventud participó en una agrupación antinazi llamada "Frente Libre Bávaro", mientras era estudiante, pero debió suspender sus estudios para servir al ejército alemán. Tiempo después, su familia se mudó a una zona de artistas en Múnich, lo cual sería una gran influencia para Ende más tarde. Entre 1947 y 1950 estudió interpretación en la escuela de Otto Falckenburg, en Munich.
Comenzó a escribir relatos de corte infantil y juvenil a principios de los años 50. Trabajó como actor, guionista de espectáculos de cabaret y como escritor de críticas cinematográficas. Logró popularidad en su país con la obra Jim Botón y Lucas el Maquinista (1960), una novela fantástica que le mereció el premio Deutscher Jugendbuchpreis como mejor libro alemán del año para público infantil. En 1962 publicó la segunda parte, Jim Botón y los 13 salvajes.
Su obra se enmarca en el género fantástico. Ha conseguido fama universal con libros como Momo (1973) y La historia interminable (1979), ambas llevadas al cine.
Sus libros tienen nombres llamativos y extraños. Algunos de los más destacados son: El libro de los monicacos (1970), Tragasueños (1978), Jojo: Historia de un saltimbanqui (obra de teatro, 1982), El Goggolori (1984), El espejo en el espejo (1986), El ponche de los deseos (1989) y Carpeta de apuntes (1994), que contiene algunos ensayos autobiográficos con algunos relatos fantásticos y de aventura.
En el año 1992 se le diagnosticó un cáncer de estómago que acabó con su vida al cabo de dos años. Michael Ende falleció a la edad de 65 años, en Stuttgart, Alemania, el 29 de agosto de 1995.



Narrador extradiegético u omnisciente.         
·        Es el narrador más común de la narrativa tradicional.
·        Es aquel que lo sabe todo; como lo que piensan los personajes, lo que sienten, e incluso su pasado. Cuenta la historia aunque no la vivió como personaje.
·        Está en tercera persona, voz narrativa que favorece siempre el objetivismo.  Es, por lo tanto, una entidad extraña al universo ficticio representado.
·        También es propio de un narrador omnisciente la distribución de la narración a su antojo, en ocasiones hace una pausa para dirigirse de forma directa al lector.



Es la historia de Momo, una niña que vivía en un viejo anfiteatro a las afueras de una gran ciudad. Momo tiene la maravillosa cualidad de saber escuchar a los demás, por ello tiene muchos amigos que la visitan. Entre ellos están Gigi Cicerone y Beppo Barrendero, que son sus mejores amigos. Todas las tardes, muchos niños se acercaban al anfiteatro para jugar, porque con Momo era imposible aburrirse. De vez en cuando, Gigi contaba cuentos e historias increíbles.
Momo era muy especial, ya que arreglaba discusiones e inventaba juegos, reconciliaba a la gente, y todo esto sin hablar, sólo escuchando a los demás.
Los hombres grises son unos hombres de carácter muy extraño, vestidos con trajes grises, sombrero y un cigarro en sus bocas. La gente no se daba cuenta de que estaban allí, pero ellos están ahí, intentando conseguir su objetivo. El objetivo es robar el tiempo a las personas, que lo más poderoso de lo que disponen. Para ello, los hombres grises convencen a las personas de que tiene que ahorrar tiempo y poner en sus depósitos. De esta forma la gente de la ciudad tenía cada vez menos tiempo y quería ahorrar aún más. Todo cambió, la gente estaba totalmente cansada y sin tiempo para los demás, menos Momo que seguía en su anfiteatro. Pero ahora nadie la visitaba porque la gente no tenía tiempo. Un día una tortuga llamada Casiopea entró en casa de Momo y le dijo que la siguiera. Momo la obedeció y después de un largo viaje llegaron a una casa rara donde vivía El Maestro Hora, Segundo Minuto Hora.
El Maestro le dijo que estaba en peligro, ya que los hombres grises la buscaban. Esa búsqueda se debía a que Momo estaba arruinando el trabajo de estos y resultaba una molestia. Momo se dio cuenta de que la casa estaba rodeada de hombres grises que querían entrar sin éxito. Tenía que acabar con ellos para que todo volviera a ser como antes y la única solución era que El Maestro parara el tiempo para que los hombres grises se quedaran sin reservas de tiempo y desaparecieran. El problema es que Momo tenía que abrir el depósito de tiempo para que volviera a sus propietarios en solo una hora. Y así se hizo, El Maestro paró el tiempo y los hombres grises corrieron hacia sus depósitos para poder sobrevivir. Momo aprovechó el momento para abrir los depósitos y devolver el tiempo a la gente. Los hombres grises al quedarse sin tiempo que consumir y desaparecieron al instante.
Con el tiempo de vuelta a sus propietarios, todo volvió a ser como antes y el anfiteatro volvió a estar lleno de niños que estaban con Momo.



Michael Ende intentó crear un estilo de escritura fantástica con sus propias reglas. Su ambición literaria estribó en crear un mundo coherente, no necesariamente con el mundo real pero sí con temas reales. Una y otra vez experimentó con historias cortas, pero siempre se exasperaba al encontrar que la narrativa convencional pedía que cada evento fuera lógicamente derivado de una causa. 
Ya antes de mudarse a Roma, Michael había trabajado la idea de Momo, pero la mayor parte del libro fue escrito en Italia, influenciado por su cultura y estilo de vida. Le tomó varios años escribirlo, porque se detenía constantemente a escribir otras historias. 
El trabajo de Michael Ende era lento pues daba tiempo a que sus ideas maduraran, muchas de sus poesías se escribieron a lo largo de décadas, porque cada tanto añadía nuevos versos, conservando sin embargo, la versión original para compararla posteriormente con la nueva. Por ello cuando trabajó en Momo, escribió dos o tres partes e hizo varios cambios, después esperó un tiempo para que la historia tomara su propio curso.
En la historia de Momo, el narrador nos describe que los acontecimientos se desarrollan principalmente en las ruinas de un viejo anfiteatro ubicado en las afueras de una ciudad italiana sin nombre, aunque también parte de la historia se desarrolla en dicha ciudad.



·        Momo:
Es una niña que tiene una habilidad especial para escuchar. Tiene muchos amigos que van a visitarla a su casa en el viejo anfiteatro. Es la principal enemiga de los Hombres Grises o Ladrones de tiempo.
Desde el principio de la historia, se deja claro que Gigi Cicerone y Beppo Barrendero son sus dos mejores amigos, a pesar de estar rodeada de muchas personas. La tortuga Casiopea la acompaña  en su aventura contra los Hombres Grises.
·        Casiopea:
Es la tortuga de El Maestro Hora, Segundo Minuto Hora. Es una tortuga común y corriente, excepto porque es capaz de comunicarse haciendo formas de letras en su caparazón.
También es capaz de saber qué ocurrirá con media hora de anticipación, no puede cambiar el futuro, sólo conocerlo. Mientras huyen por la ciudad de los hombres grises, Momo y Casiopea los evitan gracias a que la tortuga sabe dónde no estarán los ladrones del tiempo con media hora de anticipación para esquivarlos. También  sabe que ambas se separarán en un momento de la persecución, pero no puede evitarlo.
·        El Maestro Hora, Segundo Minuto Hora.
El Maestro manda a traer a Momo para protegerla de los hombres grises que la andaban buscando porque interfería en sus planes de robar el tiempo a las personas. El Maestro le cuenta todo acerca de los hombres grises y la forma de derrotarlos. Detiene el tiempo y de esta manera,  Momo pudo derrotar a los hombres grises.     

·        Los hombres Grises
Son unos hombres de carácter muy extraño, vestidos con trajes grises, sombrero y un cigarro en sus bocas. Su objetivo es robar el tiempo a las personas, que lo más importante que poseen.
Son derrotados por Momo, con la ayuda de Casiopea y de El Maestro, y así, el tiempo se le es regresado a las personas.   
·        GiGi Cicerone
Su verdadero nombre es Girolamo. Junto con Beppo Barrendero, es el mejor amigo de Momo. Es un magnífico cuentacuentos.
Tras la desaparición de Momo, los Hombres Grises lo compran y lo hacen famoso por sus cuentos. Al principio todo va bien, pero con el tiempo deja de tener imaginación. Pero eso no le impide seguir y comenzó a repetir las historias. Nada de eso parece afectar a su fama.







martes, 30 de noviembre de 2010

LINEA DE TIEMPO

LITERATURA EUROPEA





LITERATURA DE LA REVOLUCION MEXICANA

LITERATURA DE LA REVOLUCION MEXICANA
La literatura de la Revolución Mexicana es ante todo una expresión en el ámbito de la narrativa, fundamentalmente la novela.
La literatura aporta y complementa, para la comprensión del fenómeno revolucionario, aquello que fuentes documentales como los manifiestos, planes, proclamas, leyes y demás no pueden hacer: caracteriza, retrata de cuerpo entero a los personajes, sus ideas, sus anhelos y sus pasiones.
Todo aquello que no puede asentarse en un "documento oficial" se obtiene por medio del boceto, del dibujo de los personajes literarios. Por ejemplo, la literatura hace comprensible para el análisis histórico frases y sucesos propios del periodo revolucionario, como el verbo "madrugar", que aludía a la forma de asesinar a los contrarios, con alevosía y traición.
También capta la literatura de la Revolución la manera de actuar de los políticos de entonces y su falta de sinceridad, como bien se muestra, por ejemplo, en "La Moscas" de Mariano Azuela: cómo se las ingenia cierto tipo de gente para sobrevivir, siendo lo de menos de qué lado se encuentran sus lealtades.

Ese retrato crudo es un hilo conductor de la narrativa de la Revolución: no importa quién, no importa qué, todo se convierte en sustento para descreer, para el desencanto. Una visión tenuemente optimista sólo puede provenir del pueblo, de su anónima capacidad para el sacrificio, para el valor, para la esperanza.

Para la generación de escritores que había crecido al amparo de más de tres décadas de paz porfiriana, el movimiento revolucionario la condujo a ajustar sus herramientas narrativas, ante el momento histórico que se vivía.

La Revolución Mexicana representó una oportunidad para dar noticia literaria de hechos y de gente, para hacer creíbles acontecimientos y actitudes, para "retratar" el lenguaje y el habla de una caótica mezcla de personas de la más diversa extracción social, con diferentes ideas, convicciones y credos.

Otro hilo conductor de la narrativa de la Revolución, aunque resulta obvio consignarlo, es la presencia permanente de la violencia, el ineludible telón de fondo en el que se desarrolla la vida toda del México de entonces.
No son pocas las obras literarias que fueron escritas fuera de México, en el destierro obligado o voluntario, ya que se estaban narrando acontecimientos muy recientes.

Ello explica el tono autobiográfico recurrente de las obras, así como las tomas de posición política al respecto. Escribir y publicar en el país podía ser arriesgado y era preferible conducirse con prudencia.
La narrativa de la Revolución Mexicana es una fuente para la memoria histórica, de ahí que haya sido retomada por el cine; porque ella muestra cómo la realidad supera a la ficción y porque el cine, como un medio masivo de comunicación, le recuerda a la sociedad esa memoria de su pasado.


VANGUARDIA DEL ARTE

IMPRESIONISMO
El término Impresionismo se aplica en diferentes artes como la música y la literatura, pero su vertiente más conocida, y aquélla que fue la precursora, es la pintura impresionista. El movimiento plástico impresionista se desarrolló a partir de la segunda mitad del siglo XIX en Europa (principalmente en Francia) en contra de las fórmulas artísticas impuestas por la Academia Francesa de Bellas Artes, y caracterizado, a grandes rasgos, por el intento de plasmar la luz (la “impresión” visual) y el instante, sin reparar en la identidad de aquello que la proyectaba. Es decir, si sus antecesores pintaban formas con identidad, los impresionistas pintarán el momento de luz, más allá de las formas que subyacen bajo éste. El movimiento fue bautizado por la crítica como Impresionismo con ironía y escepticismo respecto al cuadro de Monet Impresión: sol naciente. Siendo diametralmente opuesto a la pintura metafísica, su importancia es clave en el desarrollo del arte posterior, especialmente del postimpresionismo y las vanguardias. El objetivo de los impresionistas era conseguir una representación del mundo espontánea y directa.



EXPRESIONISMO
El expresionismo fue un movimiento cultural surgido en Alemania a principios del siglo XX, que tuvo plasmación en un gran número de campos: artes plásticas, literatura, música, cine, teatro, danza, fotografía, etc. Su primera manifestación fue en el terreno de la pintura, coincidiendo en el tiempo con la aparición del fovismo francés, hecho que convirtió a ambos movimientos artísticos en los primeros exponentes de las llamadas “vanguardias históricas”. Más que un estilo con características propias comunes, fue un movimiento heterogéneo, una actitud y una forma de entender el arte que aglutinó a diversos artistas de tendencias muy diversas y diferente formación y nivel intelectual. Surgido como reacción al impresionismo, frente al naturalismo y el carácter positivista de este movimiento de finales del siglo XIX, los expresionistas defendían un arte más personal e intuitivo, donde predominase la visión interior del artista (la “expresión”) frente a la plasmación de la realidad (la “impresión”).
El expresionismo suele ser entendido como la deformación de la realidad para expresar de forma más subjetiva la naturaleza y el ser humano, dando primacía a la expresión de los sentimientos más que a la descripción objetiva de la realidad. Entendido de esta forma, el expresionismo es extrapolable a cualquier época y espacio geográfico. Así, a menudo se ha calificado de expresionista la obra de diversos autores como Matthias Grünewald, Pieter Brueghel el Viejo, El Greco o Francisco de Goya. Algunos historiadores, para distinguirlo, escriben “expresionismo” (en minúsculas) como término genérico y “Expresionismo” (en mayúsculas) para el movimiento alemán.
Con sus colores violentos y su temática de soledad y de miseria, el expresionismo reflejó la amargura que invadió a los círculos artísticos e intelectuales de la Alemania prebélica, así como de la Primera Guerra Mundial y del período de entreguerras (1918-1939). Esa amargura provocó un deseo vehemente de cambiar la vida, de buscar nuevas dimensiones a la imaginación y de renovar los lenguajes artísticos. El expresionismo defendía la libertad individual, la primacía de la expresión subjetiva, el irracionalismo, el apasionamiento y los temas prohibidos (lo morboso, demoníaco, sexual, fantástico o pervertido). Intentó reflejar una visión subjetiva, una deformación emocional de la realidad, a través del carácter expresivo de los medios plásticos, que cobraron una significación metafísica, abriendo los sentidos al mundo interior.



CUBISMO
El Cubismo tuvo como centro neurálgico la ciudad de París, y como jefes y maestros del movimiento figuraban los españoles Pablo Picasso y Juan Gris y los franceses Georges Braque y Fernand Léger. El movimiento efectivamente se inicia con el cuadro "Las Señoritas de Avignon" (Demoiselles D'Avignon). Como elementos precursores del cubismo debemos destacar la influencia de las esculturas africanas y las exposiciones retrospectivas de Georges Seurat (1905) y de Paul Cézanne (1907). Es una tendencia esencial, pues da pie al resto de las vanguardias europeas del siglo XX. No se trata de un ismo más, sino de la ruptura definitiva con la pintura tradicional.
El cubismo es considerado la primera vanguardia, ya que rompe con el último estatuto renacentista vigente a principios del siglo XX, la perspectiva. En los cuadros cubistas, desaparece la perspectiva tradicional. Trata las formas de la naturaleza por medio de figuras geométricas, fragmentando líneas y superficies. Se adopta así la llamada “perspectiva múltiple”: se representan todas las partes de un objeto en un mismo plano. La representación del mundo pasaba a no tener ningún compromiso con la apariencia de las cosas desde un punto de vista determinado, sino con lo que se sabe de ellas. Por eso aparecían al mismo tiempo y en el mismo plano vistas diversas del objeto. Ya no existe un punto de vista único. No hay sensación de profundidad. Los detalles se suprimen, y a veces acaba representando el objeto por un solo aspecto, como ocurre con los violines, insinuados sólo por la presencia de la cola del mismo.
A pesar de ser pintura de vanguardia los géneros que se pintan no son nuevos, y entre ellos se encuentran sobre todo bodegones, paisajes y retratos.
Con todas estas innovaciones, el arte acepta su condición de arte, y permite que esta condición se vea en la obra, es decir es parte intrínseca de la misma. El cuadro cobra autonomía como objeto con independencia de lo que represente, por ello se llega con el tiempo a pegar o clavar a la tela todo tipo de objetos hasta formar collages.



FUTURISMO
El futurismo surgió en Milán, Italia, impulsado por Filippo Tommaso Marinetti. Este movimiento buscaba romper con la tradición, el pasado y los signos convencionales de la historia del arte. Consideraba como elementos principales a la poesía, el valor, la audacia y la revolución, ya que se pregonaba el movimiento agresivo, el insomnio febril, el paso gimnástico, el salto peligroso y la bofetada irreverente. Tenía como postulados: la exaltación de lo sensual, lo nacional y guerrero, la adoración de la máquina, el retrato de la realidad en movimiento, lo objetivo de lo literario y la disposición especial de lo escrito, con el fin de darle una expresión plástica.
Rechazaba la estética tradicional e intentó ensalzar la vida contemporánea, basándose en sus dos temas dominantes: la máquina y el movimiento. Se recurría, de este modo, a cualquier medio expresivo (artes plásticas, arquitectura, urbanismo, publicidad, moda, cine, música, poesía) capaz de crear un verdadero arte de acción, con el propósito de rejuvenecer y construir de nuevo la faz del mundo.



DADAISMO
Movimiento artístico surgido primero en Europa y posteriormente en Norteamérica; fue creado en el Cabaret Voltaire en Zúrich, Suiza entre 1916 y 1922 con Hugo Ball como fundador y, posteriormente, adoptado por Tristan Tzara, quien se convertiría en la figura representativa de dadá. Surgió del desencanto que sentían los miembros al vivir en la Europa del periodo tardío de la Primera Guerra Mundial y posteriormente, en actitud de rebelión a hacia la abulia y desinterés social característico de los artísticas del periodo de entreguerras.[1]
Dadaísta suele ser una sucesión de palabras y sonidos, lo que hace difícil encontrarle lógica. Se distingue por: la inclinación hacia lo dudoso, la muerte, lo fantasioso, y la constante negación. Así, busca renovar la expresión mediante el empleo de materiales inusuales o manejando planos de pensamientos antes no mezclables lo cual conlleva a una tónica general de rebeldía o destrucción.
El Dadá es caracterizado, también, por gestos y manifestaciones provocadoras en las que los artistas pretendían destruir todas las convenciones con respecto al arte, creando, de esta forma, un antiarte. Sus orígenes se localizan cuando una serie de artistas de distintas nacionalidades se encontraron como refugiados en Zúrich durante la Primera Guerra Mundial.
Dadá se presenta como una ideología total, como una forma de vivir y como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior. En el fondo es un antihumanismo entendiendo por humanismo la tradición anterior, tanto filosófica como artística o literaria.
El movimiento dadaísta es un movimiento antiartístico, antiliterario y antipoético porque cuestiona la existencia del arte, la literatura y la poesía. Por definición, cuestiona el propio dadaísmo.
Dadá se manifiesta contra la belleza eterna, contra la eternidad de los principios, contra las leyes de la lógica, contra la inmovilidad del pensamiento, contra la pureza de los conceptos abstractos y contra lo universal en general. Propugna, en cambio, la desenfrenada libertad del individuo, la espontaneidad, lo inmediato, actual y aleatorio, la crónica contra la intemporalidad, la contradicción, el no donde los demás dicen sí y el sí donde los demás dicen no; defiende el caos contra el orden y la imperfección contra la perfección. Por tanto, en su rigor negativo también está contra el modernismo, y las demás vanguardias: el expresionismo, el cubismo, el futurismo y el abstraccionismo, acusándolos, en última instancia, de ser sucedáneos de cuanto ha sido destruido o está a punto de serlo. La estética dadá niega la razón, el sentido, la construcción del consciente. Sus formas expresivas son el gesto, el escándalo, la provocación. Para dadá la poesía está en la acción y las fronteras entre arte y vida deben ser abolidas.


ULTRAISMO
Ultraísmo es un movimiento literario nacido en España en 1918, con la declarada intención de enfrentarse al modernismo, que había dominado la poesía en lengua española desde fines del siglo XIX.
1.     Reducción de la lírica a su elemento primordial: la metáfora.
2.     Tachadura de las frases medianeras, los nexos y los adjetivos inútiles.
3.     Abolición de los trabajos ornamentales, el confesionalismo, la circunstanciación, las prédicas y la nebulosidad rebuscada.
4.     Síntesis de dos o más imágenes en una, que ensancha de ese modo su facultad de sugerencia.
5.     Imágenes y metáforas chocantes, ilógicas, donde destacan el mundo del cine, del deporte, del adelanto técnico:
6.     Tendencia a establecer una disposición tipográfica nueva de las palabras del poema, pretendiendo de ese modo hacer ver una fusión de la plástica y la poesía.
7.     Neologismos, tecnicismos y palabras esdrújulas.
8.     Eliminación de la rima.
9.     El ultraísmo coincidía con las otras vanguardias en eliminar el sentimentalismo.



SURREALISMO
El Surrealismo o superrealismo, es un movimiento artístico y literario surgido en Francia a partir del dadaísmo, en la década de los años 1920, en torno a la personalidad del poeta André Breton. Buscaba descubrir una verdad, con escrituras automáticas, sin correcciones racionales, utilizando imágenes para expresar sus emociones, pero que nunca seguían un razonamiento lógico.
La meta surrealista y sus medios se remontan siglos antes al nacimiento del movimiento. Basta citar a Hieronymus Bosch "el Bosco", considerado el primer artista surrealista, que en los siglos XV y XVI creó obras como "El jardín de las delicias" o "El carro del heno". Pero fue en el siglo XX cuando surgiría el nacimiento de una vanguardia filosófica y artística que retomaría estos elementos y los desarrollaría como nunca antes se había hecho.
El surrealismo tomó del dadaísmo algunas técnicas de fotografía y cinematografía así como la fabricación de objetos. Extendieron el principio del collage (el "objeto encontrado") al ensamblaje de objetos incongruentes,
Otra de las nuevas actividades creadas por el surrealismo fue la llamada cadáver exquisito, en la cual varios artistas dibujaban las distintas partes de una figura o de un texto sin ver lo que el anterior había hecho pasándose el papel doblado.
En el terreno literario, el surrealismo supuso una gran revolución en el lenguaje y la aportación de nuevas técnicas de composición. Como no asumía tradición cultural alguna, ni desde el punto de vista temático ni formal, prescindió de la métrica y adoptó el tipo de expresión poética denominado como versículo: un verso de extensión indefinida sin rima que se sostiene únicamente por la cohesión interna de su ritmo. Igualmente, como no se asumía la temática consagrada, se fue a buscar en las fuentes de la represión psicológica (sueños, sexualidad) y social, con lo que la lírica se rehumanizó después de que los ismos intelectualizados de las Vanguardias la deshumanizaran, a excepción del Expresionismo. Para ello utilizaron los recursos de la transcripción de sueños y la escritura automática, y engendraron procedimientos metafóricos nuevos como la imagen visionaria. El lenguaje se renovó también desde el punto de vista del léxico dando cabida a campos semánticos nuevos y la retórica se enriqueció con nuevos procedimientos expresivos.



ESTRIDENTISMO
El Estridentismo fue un movimiento artístico interdisciplinario que se inició el 31 de diciembre de 1921 en la ciudad de México, tras el lanzamiento del manifiesto Actual Nº1 por el poeta Manuel Maples Arce. A él se sumaron Arqueles Vela, Germán List Arzubide, Salvador Gallardo, Germán Cueto, Ramón Alva de la Canal y Leopoldo Méndez, quienes constituirían el grupo estridentista, propiamente dicho. En 1925, la mayoría de ellos se establece en Xalapa (que será rebautizada y proyectada en sus obras como Estridentópolis), donde realizan una gran labor editorial, cultural y educativa, colaborando en la fundación de la Universidad Veracruzana, bajo los auspicios del gobernador de Veracruz Heriberto Jara, hasta que éste fue depuesto, por el gobierno federal, debido a su apoyo a la defensa de los derechos de los obreros frente a las compañías petroleras estadounidenses y británicas, en la cuestión de la explotación petrolera. Así, al verse privado de su protector, el grupo estridentista se disolvió, en 1927. Cada uno continuó produciendo obras por separado, y es así como encontramos autores produciendo aún en los años 1980 y años 1990.
Estéticamente, los artistas estridentistas conjugaban el simultaneísmo del
cubismo, la irreverencia de Dadá y el aspecto moderno del futurismo, al tiempo que daban cabida a las expresiones de la cultura popular y de masas del México de los años 1920. Su eclecticismo los llevó a procurar una simbiosis original entre todas las tendencias de la vanguardia, además de desarrollar una dimensión actualista y social, derivada de la Revolución mexicana. Junto con los Contemporáneos, representan el impulso de renovación estética y cultural hacia una literatura moderna y cosmopolita.



EXISTENCIALISMO
El existencialismo es un movimiento filosófico, cuyo postulado fundamental es que los seres humanos, en forma individual, son los que crean el significado y la esencia de sus vidas.
La corriente, de manera general, destaca el hecho de la libertad y la temporalidad del hombre, de su existencia en el mundo más que de su supuesta esencia profunda. Las cuestiones filosóficas del existencialismo tienden a escudriñar en lo profundo de la condición humana.
Emergió como movimiento en el siglo XX, en el marco de la literatura y la filosofía, heredando algunos de los argumentos de filósofos anteriores como Schopenhauer, Kierkegaard, Nietzsche y Unamuno.
El existencialismo es una corriente, movimiento o serie de doctrinas filosóficas y culturales que tiene por objetivo y disciplina, el análisis y la descripción del sentido individual de la vida humana en cuanto “existe”. Sostiene que el existente humano piensa, actúa, se refiere y relaciona consigo mismo, con su propia trascendencia, con sus contradicciones y sus angustias. Para el pensamiento existencialista el individuo no es una porción mecánica o “parte” de un todo, sino que el hombre es en sí una “íntegridad” libre por sí. Esta doctrina filosófica considera qué es la existencia del ser humano libre y qué es lo que define su esencia, en lugar de entender que su esencia o condición humana determina su existencia. Para esta corriente del pensamiento la existencia del ser humano no es nunca un “objeto” sino que, desde el momento que el ser humano es capaz de generar pensamiento “existe”; en consecuencia el reconocimiento de esa existencia tiene primacía y precedencia sobre la esencia. No obstante, la existencia del hombre puede ser inauténtica o falsa si éste renuncia a su libertad. La carencia de libertad es carencia de existencia. En un sentido estricto para el existencialismo las cosas materiales y el hombre "existen", pero no "son" (es decir, no son nada real, en el sentido de tener una substancia separada de todas las demás y encerrada en sí misma; este era el modo en el que, por ejemplo, Aristóteles caracterizaba a la Ousía).
El existencialismo implica que el individuo es libre y, por ende, totalmente responsable de sus actos. Esto incita en el ser humano la creación de una ética de la responsabilidad individual.